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Buscando antiguas geologías, cultivan viñedos en el Challao y en Canota
En la búsqueda cada vez más afilada de nuevos terroirs que den novedosas expresiones, Santiago Achával y Roberto Cipresso plantaron viñedos en el Challao y en las tierras de Canota, en Villavicencio.
En un interesante desafío a la agricultura, el viñedo del Challao crece en las laderas de los cerros precordilleranos, con un sistema de conducción en vaso, a 1.600 metros de altura. Crece en áreas muy pequeñas, en suelos originales, no aluvionales, conformados por piedras calizas de 40 a 450 millones de años de antigüedad y basaltos volcánicos fracturados.
